18 junio 2010

HIJO MIO: QUE TU VIDA ESTE PLENA DE....

Nadie nace, sabiendo ser padre, nadie nos dijo que asi como hay alegrias, hay dolor, sufrimiento, pero pasado todo eso, definitivamente, no hay nada que se compare con el placer de ser padre.
El presente pensamiento, lo arregle hace ya muchos años, y me decia: si a mi alguien me hubiera dicho todo eso... pero es parte del proceso, dice un refran: si las cosas que cuestan se hicieran facilmente, cualquiera las haria.
Al escribir acerca de mi padre, me siento orgulloso, orgulloso de ser parte de una generacion que iniciara con mis bisabuelos.
La vida de mi propio padre se convierte un ejemplo a seguir, aunque lucho y lucho por ser yo, por desmarcar todo eso que los envidiosos y los mezquinos puedan señalar, como imitacion, trato de ser yo, sin embargo me sale lo Jimenez sin proponermelo, esa es la herencia de mi padre.
Estoy muy agradecido con la vida, con las enseñanzas que recibi, sigo luchando, defendiendo mis ideas, mis sueños, me decpciono de aquellas personas en quien confie alguna vez, pero que hemos de hacer, son la clara muestra de que vamos por buen camino, y de sus errores me alimento, de mis propios errores me tengo que levantar, y solo por eso sigo adelante, pero mas aun cuando recuerdo que ahora hay detras de mi un par de chiquillos inquietos y preguntones como alguna vez lo fui, que buscan respuestas a todo, y que yo estoy ahi para resolver. Si, ya sacrifique mucho y creo que ya estuvo bien, esta semana que termina, termino para mi otro azoton, otra tormentita, pero ya paso, mi nena enfermo y casi me vuelvo loco, aun asi cumpli con mis compromisos, me da tristeza dejarla por cumplir un compromiso mas, pero ni hablar, tambien hay que comer, y tambien tengo palabra.
Estas tormentas me recuerdan la fortaleza que debe tener un padre, a veces he sentido que voy a tronar, que quiero dejar todo y que las cosas se complican, pero saben, es cuando mas fuerte debo estar, cuando mas debo aferrar a que: aunque la tormenta sea fuerte, y las aguas lleguen hasta el cuello, el sol brillara otra vez.
Felicidades a los papas, a los hermanos, hijos, hermanos y amigos, y aunque no tengamos un dia fijo para celebrar, tenemos mucho mas, aunque tengamos que trabajar ese dia, nos quedan 364 dias mas para disfrutar con la familia.
Gracias a mis hermanas, cuñados, sobrinas, a mi madre, tios. mi esposa y a mis hijos, por adelantarme este festejo el domingo pasado, fue un recordar al lider, al padre, al hermano al amigo que ya no esta con nosotros, a un servidor, aunque solo sea su hermano, el hijo.